sábado, 23 de febrero de 2013

Fuiste


Ha pasado mucho tiempo desde que nos dimos el último abrazo. Si hubiera sabido que era el último no me hubiera separado de ti... pero es que yo tenía fe ciega en nuestra amistad. En las tardes que pasábamos juntos y todos los momentos que ahora son recuerdos que no pueden volver... Porque al principio sufría tu ausencia, aunque me acabé acostumbrando a no verte, a no escucharte, a no olerte cuando me abrazabas porque tenías frío... pero después me di cuenta de que no podía darme más pena. Quizá fue culpa mía, o de los demás, porque nuestra amistad era perfecta, eras mi mejor amigo, eras alguien imprescindible. Ha pasado mucho tiempo y sigo viendo cómo sonríes, cómo te ha cambiado la voz y también veo como ya todo da igual. Me decepcionaste. Quizá yo fui quien más decepcionó, pero todo el mundo tiene fallos y los amigos no se guían por lo que dicen, sino por lo que viven. Así que después de todo, supongo, que no eras mi amigo, que todo era falso. Ahora puedo decir que verte no me supone malestar como antes, ahora verte es ver a un desconocido, a alguien que me importó y que, tristemente, hoy ya, no me importa. Sé feliz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario